lunes, 20 de abril de 2009

Admirador

¡Cuánto toque en la palma de mi mano!
¡Cuánto lumen al fondo de mis ojos!
¡Cuánto vilo de duda en mis enojos!
¡Cuánto débil andar para un humano!

¡Cuánta letra marcada como arcano!
¡Cuánta noche tornada en mil despojos!
¡Cuánta piedra sembrada en mis abrojos!
¡Cuánta aurora y ocaso en un anciano!

¡Cuántas horas echadas al olvido!
¡Cuántos pasos desde que te levantas!
¡Cuántas luces perdidas entre ruido!

¡Cuántas voces con vida en sus gargantas!
¡Cuántos libros las ratas se han comido!
¡Cuántos cuántos, y a veces cuántas cuántas!

No hay comentarios: