viernes, 30 de octubre de 2009

Siento una lágrima que quiere ser libre, Parte VI

VI

Pienso en ti como si fueses real,
A veces pienso que de verdad te quería,

El reloj es una cuerda floja desde donde esparzo mis miedos al mundo entero

Soy un hombre
Vulnerable
Vano

Te fuiste sólo para que yo te extrañara,
Igual que hace el sol cada tarde,

Las calles son una fuente de donde mis temores toman su aliento

Soy un hombre
Un hombre
Un hombre

Que brille, que resplandezca el vómito del volcán,
Que despierte el día,

Hay una red entretejida y un destino inmóvil y eterno, un puerto seguro, en algún lugar

Soy un hombre
Una medida de tiempo
Débil
Una vida

Hay sangre que espera salir de mi pecho por algún lado,
Se está amontonando debajo de mi piel

Escucho un redoblante astral y un reflector me alumbra, hay aplausos en medio de la lluvia

Soy un hombre
Una madeja de lodo y humo
Un hombre vano
Vulnerable y débil
Una medida inexacta de tiempo
Una vida

Soy un recipiente muy pequeño para el día,
Y pienso en ti como si fueses real

Estás en medio mío como un amuleto incrustado en mi carne

Esta es la verdad, la única verdad que conozco:
Que no entiendo.

Siento una lágrima que quiere ser libre, Parte V

V

Estoy tocando tu puerta con todas mis fuerzas,
No se ni para qué si entiendo que no abrirás otra vez

Un fantasma se esconde para esperarte,
Para espantarte cuando al fin salgas

Me voy a volver piedra para quedarme en tu camino
Y verte pasar al menos.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Siento una lágrima que quiere ser libre, Parte IV

IV

He muerto y no lo he disfrutado,
He visto mi sangre descomponerse en el suelo,
Todos mis órganos desparramados,
Mi corazón escupiendo negruras…

He muerto
El miedo me ha paralizado tanto
Mis labios han temblado por última vez
Varias veces…

He muerto
Mi piel ha quedado blanca y violeta,
Mi cuerpo ha sido dividido en tantas partes,
Me han destazado igual que a un cerdo,
Han tomado sangre con agua de mi cráneo,
Han cortado mi garganta,
Fracturado mi esternón,
Examinado todo…

He muerto y he llorado

He vivido y he llorado

He vivido
No sé si la vida ha sido más que esta colección de cargas,

He amado y he llorado

Me he sentado igual que hoy, en medio de un paraíso irreal,
En medio de un desierto real…

He llorado

He reído y he llorado

Quisiera vivir otra vez

lunes, 26 de octubre de 2009

Siento una lágrima que quiere ser libre, Parte III

III

Soy parte de un éxodo eterno,
Soy uno más en este peregrinar,
Soy una ola,
Un destello,
Un soplo,
Un ser,
Humano.

viernes, 23 de octubre de 2009

Siento una lágrima que quiere ser libre, Parte II

II

Me siento igual que un tiro al blanco,
Amenazado por tantos filos,
Corro por las calles como si me persiguieran,
Trato de esconderme en un texto
Y miro como cada adjetivo me traiciona,
deja pasar al delincuente que quiere terminar con mi vida…

Me siento igual que un bistec herido,
Y estoy saciando el hambre del mundo
Con mi sangre, con el desparramar de mi existencia,
Y el planeta entero escupe mi humanidad con asco…

Me siento igual que un charco de lluvia con un cigarro moribundo cerca,
Me empiezo a marear con ese humo agónico,
He teñido de frío el suelo maldito
mientras éste me succiona hasta que desaparezco…

Me siento igual que una nube perdida en medio de la noche,
No tengo a donde ir, no conozco el camino,
Y cada paso que doy es una amenaza a mi integridad…

Estoy en un borde muy delgado,
En la frontera entre dos abismos,
Clamo a Dios porque esta orilla sea un puente,
por eso y porque yo esté avanzando.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Siento una lágrima que quiere ser libre, Parte I

I

Tengo miedo,
Esa es la verdad,
Tiemblo como un aguacero de mayo,
Como un hilo del sol a través del filtro de un árbol,
Como cada una de mis afirmaciones
Tiemblo

Tengo miedo,
Miro en cada espejo de la calle
mi reflejo que trata de esconderse de mi,
No tiene a donde escapar

Me busco en cada esquina de esta habitación vacía,
Soy un rastro de cigarro que cayó del cielo,
Una hoja de otoño,
Un sol rojo que no dura más que un sueño,
Soy un ave equilibrada en un cable por última vez,
Un gato herido,
Una espada oxidada,
Soy una muralla rota,
Un patio gris,
Una telaraña cubierta de rocío,
Un espejismo condenado a desaparecer
Y no quiero…

…Por eso tiemblo.

lunes, 19 de octubre de 2009

Tríptico: Artificio, Parte III

III
La noche es un tequila sin botella,
un astro se revuelve
y luego escupe grillos ebrios.

¿Y cuántos (nunca supe) suspiros le caben a una hora?

Ella,
la luna,
es la comadrona que sella los sortilegios
en cualquier frasco sin preguntar,
una mueca de asco se le refleja cuando cree que no la vemos,
parece que se cayó de cabeza,
le falta portar casco…

La noche es la pluma de un zopilote enorme y sin nido,
su aire es completo misterio de viajes en secreto.

Mil noches son un ala y un barrote de la jaula del calendario,
azote de las curias de verano,
se mece con los ciclones en extrapolares picoteos,
suenan los despertares del céntrico parloteo al interior de un aro
disfrazado de ecuador,
y plumas muertas en
quinientos pares.

viernes, 16 de octubre de 2009

Tríptico: Artificio, Parte II

II
Soy árbol de otoño,
también una isla desierta,
a veces soy un ave en vuelo
o el sol,
o nube,
a veces soy el cielo.

Soy la constelación que no legisla los destinos,
soy astro que se aísla como buscando sin querer hallar.

Soy extranjero de cualquier lugar poblado,
soy cualquiera,
soy excusa del tiempo perdido,
soy inconclusa escena,
soy la arena y soy el mar.

Soy una raíz quebrada,
soy un cerro convertido en rastro,
soy residual del siglo pasado,
soy voz,
ritual.

Soy causa conspirada,
soy un yerro de la historia,
soy bautizo y entierro.

Soy centro,
soy extremo,
soy esquina,
soy hecho y palabra,
soy la propina del embajador de algún inframundo.

Soy causa,
soy efecto,
soy un mundo imperfecto perdido entre neblina.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Tríptico: Artificio, Parte I

I
Yo vi
que serpenteaba a medianoche la luz que se escondía
de la mañana,
vestida de crayón y porcelana,
perdida en una sombra
y es que anoche perdió su luz la luna
con el broche que mal se pretendió
volver un faro sin mar,
sin playa.

No me queda claro que cosa era,
no entiendo todavía,
la luz,
la circunstancia,
luz de día,
ráfaga que cruzó como un disparo los cielos
del ocaso rojo raro.

La noche,
traicionera,
no detuvo la causa
pero tampoco retuvo el efecto plasmado en todos lados,
mis ojos concibieron
los costados de la brunicidad teñida en cyan,
era la madrugada.

¿Dónde están los ecos de la noche?
¿A dónde fueron las eras?
¿las rutinas?
¿Perecieron?
El aire no contesta.

Un alacrán parece estar inmerso en mi pupila,
pero no despertó tras de mi suela,
me voy,
no sé,
mi barca es una escuela,
mi mapa es una esponja que destila recuerdos que se pierden.

En la fila soy el último,
también el primero.

No sé,
parece que siempre hay un pero colgando de cualquier explicación
y el tiempo, la desnuda sinrazón,
se luce cual verdugo justiciero.

A veces las palabras se me esconden y busco entre las razones ajenas,
no siempre tengo suerte,
las colmenas prefabricadas son malas,
responden a reproches vanos,
no corresponden con la forma de mis alas cuadradas.

Las noches
antes de mis madrugadas se emplazan unas a otras,
no se miran frente a frente,
pero todas suspiran.

Los duendes se fugaron con mis hadas.

lunes, 12 de octubre de 2009

Al otro lado del telón final, Parte Final

V

Extraño los corredores,
Los hilos teñidos de rojo que pendían de una ventana,
La sensación de esperar a alguien…
La nostalgia que se quedó muerta en el reloj,
Extraño la estrella más bonita de la mañana,
La luz de mis primeros días,
Cuánto extraño aquellas puertas de cristal,
Y su mostrador, y sus cheques de viajero,
Y sus aromas tan dulces, sus huellas dactilares…

Pero las huellas se perdieron debajo de tantas otras,
Los aromas de disolvieron, los cheques se perdieron,
El mostrador está roto y las puertas ya ni existen…
Mis sábados son ahora tan oscuros,
Las noches duran todo el día,
La nostalgia se volvió tristeza,
La espera, tedio…
La ventana dejó caer sus lágrimas a la primera lluvia…

Que lejos están los corredores,
Los extraño tanto…

viernes, 9 de octubre de 2009

Al otro lado del telón final, parte IV

IV

Se me quedó a medias la historia que me estaba contando ella,
Tenía voz de porcelana y el obvio destello de un cupido desvelado en la mirada…

Encuentro un sueño desatado en medio de tantos sueños desconocidos,
Un puente se debilita y se cae pero sin producir el más leve sonido y dos riscos quedan solos…

Un hilo de plata que se sirve de la luna cual péndulo se esconde en el eter y la atmósfera se vuelve mordaza para el viento de cada noche…

Dos aves vuelan al horizonte, más allá de los montes, de las fronteras, de los mares, de los sueños…

Me vuelvo isla…

Se me quedó a medias la historia que me estaba contando ella…

miércoles, 7 de octubre de 2009

Al otro lado del telón final, Parte III

III

Una sombra se yergue sobre la vertiginosa y brillante marca de tus pasos,
Se me hace tan difícil ver hacia donde va ese sendero…
Trato de imaginarte como desprendida del final de cualquier película muda, simplemente no puedo retroceder más…

Avanzo torpemente hacia la fuente de ese resplandor,
Como ya no puedo ver las marcas de tus pies, me dedico a adivinarte, a suponerte,
Menos mal que te conozco bien…

Se empeña la luz en estrecharse hasta que ya solo quedamos tu y yo, tan separados, sepultados en la oscuridad…

lunes, 5 de octubre de 2009

Al otro lado del telón final, Parte II

II

Si no eres palabra, eres símbolo talvez, no se de qué…

Tu rostro refleja de otro mundo al mío una quietud que trata de despojar la incertidumbre que está tendida entre nos como una hamaca para la lluvia acida…

Haberte querido implica haber tropezado con el velo invisible de entre tiempo y tiempo, haberlo rasgado…

Haberlo perdido.

viernes, 2 de octubre de 2009

Al otro lado del telón final, Parte I

I

Contengo en un puño la respuesta al ojo de mi vecino,
Con ello cortándome la piel empiezo a recorrer la noche.
Me empiezo a debilitar, no sé cuando (ni cuanto) empecé a sangrar…

La calle se vuelve un témpano que pende sobre mi, estoy parado de cabeza y con los pies en el suelo: el cielo está abajo.

La alfombra negra del cielo se llena de escupitajos fluorescentes que chillan,
Se encienden y se apagan al choque de su luz y mis ojos,
Una fantasía se cuece en la cacerola de las luciérnagas: la noche se descorre.

La noche se desgaja y dos de sus partes son mi habitación perpetua,
Un sagitario lanza una flecha que pretende incrustarse en el sol pero no llega,
Se queda suspendida a medio camino: la noche empieza a sangrar.

Tinta negra y el carnicero toma con sus dos manos el hacha con que termina de partirle la espalda al universo,
Choca, truena, parte, cruje, chorrea, fluye, fluye, fluye…

La noche empieza a sangrar con mi recompensa apretada en su puño.